PoR LeO BauTisTa
Todo acabo.
A veces temo que haya sido mi
culpa. Otras veces te culpo para justificar mi culpa y entonces me castigo por
tu ausencia.
Me haces falta cuando cocino. Me
hago tanta falta cuando no reconozco el propio rostro ante el espejo. Me perdí
entre tus deseos y entre las palabras sobre planes que nunca serán. He muerto
porque te he matado. Me haces falta cuando cocino.
Ayer soñé que mañana estaríamos
juntos, hoy entiendo que todo fue un sueño de ruiseñor, que la hora nos ha
cercado.
Me harás falta cuando
cocino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario